María Acosta (Terapeuta Ocupacional del Centro de Rehabilitación Psicosocial Arturo Soria) de las Hermanas Hospitalarias y Laura Díaz (Coordinadora de la Miniresidencia de Carabanchel de las Hermanas Hospitalarias), junto a otros autores, han participado en la comunicación oral denominada “El suicidio se puede prevenir: Grupo de prevención del suicidio de la Red de Atención a Personas con Trastorno Mental Grave de la Comunidad de Madrid” que se ha presentado durante las XXIII Jornadas de la Asociación Madrileña de Salud Mental, las cuales, han tenido lugar en Madrid los días 28 y 29 de Marzo. Por su parte, los contenidos fundamentales de dicha comunicación han sido publicados en el libro de Comunicaciones Libres de dichas Jornadas.
Este trabajo explica tanto la creación como el desarrollo hasta la actualidad de un grupo de trabajo destinado a la prevención del suicidio, constituido tanto por expertos como por profesionales de las entidades gestoras de los recursos de la Red de Atención Social a personas con enfermedad mental grave y duradera de la Comunidad de Madrid. Dicho grupo cuenta con una metodología activa y participativa a través del trabajo en equipo, así como, del aprendizaje colaborativo y cooperativo.
Tras exponer lo previamente planteado, el grupo concluye que, tras los primeros años de trabajo como grupo, la Red de Atención Social a personas con trastorno mental grave de la Comunidad de Madrid colabora a la hora de prevenir el suicidio, ya que incide en los factores de protección12 (desarrollando programas de resolución de conflictos, generando apoyos sociales de calidad, empoderando y generando autoconfianza, fomentando la integración social, etc.). Si bien, pese a este hecho, se constata la necesidad de aumentar la formación de los profesionales y unificar criterios de evaluación e intervención en los recursos de la Red, así como apoyar a las entidades gestoras en el desarrollo de protocolos y creación de grupos de conocimiento para unificar criterios internos y facilitar la coordinación y participación en el grupo de la Red. Por otro lado, resulta indispensable la presencia en foros a fin de mantener vivo el tema del suicidio en las agendas de las Administraciones, profesionales, personas atendidas y familiares. Por último, concluyen que sólo de una manera integral, implicando a agentes sociales y a la comunidad en general se puede evitar el tabú y el estigma que conlleva la conducta suicida y el suicidio consumado.